Es de enorme importancia para el lector, el abordaje de los tres amores con que amamos; eros, philia y ágape...

Se sufre demasiado por amor, ésa es la verdad. Incluso los que se vanaglorian de estar perfectamente acoplados a su pareja, en lo más recóndito de su ser, a veces albergan dudas, inseguridades o pequeños miedos anticipatorios respecto a su futuro afectivo.

...pienso que el amor podría estudiarse mejor a partir de tres dimensiones básicas. Cuando estos elementos logran acoplarse de manera adecuada, decimos que estamos en presencia de un amor unificado y funcional. De acuerdo a sus raíces griegas, los nombres que reciben estos tres amores son: eros (el amor que torna y se satisface), philia (el amor que comparte y se alegra) y ágape (el amor que comparte que se da y se compadece)

Eros es el deseo sexual, el YO que anhelaPhilia es la amistad, en nuestro caso "amistad de pareja", el llamado "amor conyugal" o la amistad marital.

Ágape, es el amor desinteresado, la ternura, la delicadeza, la no violencia...

Algunas personas, intentan resignarse a un amor inconcluso, pero tarde que temprano, el déficit termina por alterar la relación y la tranquilidad personal

Insisto: sólo en la presencia activa e interrelacionada del deseo, la amistad y la compasión, el amor se realiza. El amor incompleto duele y enferma.

Conozco gente que ha disasociado los tres amores hasta configurar una especie de Frankenstein afectivo. Eros: una o dos veces por semana con él o la amante. Philia: en el hogar, junto al esposo o la esposa. Y ágape: los domingos en misa.

Buda decía que la ignorancia es el orígen de todo sufrimiento psicólogico...

NO solo se trata de amar sin apegos, lo cual es un logro importante, sino de acabar con todo tipo de sufrimiento inútil relacionado con el amor.