Al final del día todos sabemos cómo soy, hablo, hablo y hablo. Las personas que se han acercado a mí para platicar sobre sus problemas saben que soy bastante crudo, bastante directo y les digo las cosas como son, siempre digo lo que nadie quiere escuchar.
De ahí nace este podcast, si, puede ser más enfocado a niños pubertos teniendo crisis existenciales de por qué los friendzonean, por qué la chava no los pela, por qué lo odian tanto, pero son experiencias que viví solo y lo que nadie quiere escuchar es el amigo que quería tener en ese momento para que me pusiera los pies en la tierra.